Material de apoyo a las
Clases de Educación Sexual

Yo me masturbo, tú te masturbas,
todos nos masturbamos

La masturbación es otro aspecto más de la sexualidad humana, y no puede estar ausente de las clases de educación sexual debido a dos motivos: por un lado los jóvenes requieren información veraz y nosotros se la debemos; por otro lado suele ser un tema conflictivo, lleno de dudas, mitos y prejuicios y cargado de intensas emociones.

Una de esas emociones es la culpa, cuyo responsable máximo es la Iglesia Católica. En La Biblia hay al menos dos pasajes condenatorios de la masturbación (que llama acto inmundo), que por si fuera poco se trata de un pecado mortal. El Vaticano se ocupó de sacar las dudas y declaró que se trata de un acto gravemente desordenado y contranatura. El daño emocional perpetrado contra la humanidad no tiene reparación.

La masturbación no genera ningún daño mientras se realice en privado (o con el consentimiento de quien la presencie). No genera agotamiento, ni disfunciones, ni disminuye el deseo, ni provoca males de ningún tipo. Sólo reporta conocimiento y placer.

Por otro lado no existe absolutamente ningún motivo para afirmar que sea antinatural, sobre todo si recordamos que en nuestra especie el sexo tiene una función recreativa además de la procreativa. De hecho en la naturaleza existen varias especies de mamíferos en los que la masturbación ha sido reportada. Una de esas especies es la especie viva más cerana -evolutivamente hablando- a la nuestra: los bonobos. Divergieron de nuestra estirpe hace unos 2 millones de años y comparten con nosotros un 98,4% del ADN.

Los bonobos son muy parecidos a los chimpancés, un poco más pequeños, cara más negra y pelo más largo. Una de sus características más sorprendentes es la intensidad con la que viven su sexualidad. Practican el sexo recreativo con una frecuencia mucho más alta que nosotros, en todas las posiciones imaginables y con todo tipo de compañeros sexuales. Lo hacen de un modo sencillo y despreocupado y por supuesto: sin culpa. La masturbación en varias modalidades y en ambos sexos es una parte importante de su cotidianidad.

En cuanto a los hombres se sabe que la masturbación tiene, además, una utilidad fisiológica que es la de mantener una dotación fresca de espermatozoides (descartando los viejos) dispuestos para la próxima cópula y se ha verificado que la dinámica y frecuencia de la masturbación y de la cópula están asociadas. El deseo de la masturbación aparece a menudo con un día de antelación a la expectativa de coito.

De todos modos, lo más importante que debemos transmitirles a nuestros jóvenes es que la masturbación, como parte de la sexualidad, es privativo de cada persona y por lo tanto nadie tiene derecho a cuestionarla; que la viva quien quiera vivirla, sin importar su sexo ni ninguna otra condición, con toda tranquilidad y placer.

 

Algunos derechos reservados. Se permite su reproducción citando la fuente. Última actualización mar-16. Buenos Aires, Argentina.