Material de apoyo a las
Clases de Educación Sexual

Aborto

Es seguramente el asunto más espinoso que puede surgir en el marco de la educación sexual. Además su abordaje resulta peligroso para los docentes ya que el aborto está legalmente prohibido en la Argentina y equiparado al asesinato, de modo que cualquier malentendido puede derivar en un disgusto mayúsculo para el responsable de la educación sexual.

La actitud salomónica docente debe ser la de brindar toda la información científica disponible y mencionar (en principio sin tomar partido) las posturas opuestas que predominan en la discusion.

Arranquemos con datos sueltos que se pueden investigar. En la Argentina se producen aproximadamente unos 500.000 abortos clandestinos por año, casi la misma cifra de nacimientos anuales. De ellos más o menos 60.000 casos devienen en un riesgo para la salud de la mujer que requiere atención hospitalaria, de los cuales finalmente 13.000 resultan mortales. Estos casos ocurren invariablemente en el sector socioeconómico más bajo. Las estadísticas se elaboraron con métodos científicos por dos vías diferentes y concurrentes (*).

Estudios antropológicos realizados en 464 culturas diferentes indican que el aborto y el infanticidio están presentes en nuestra historia evolutiva de manera constante.

En cuanto a la presentación de la disputa en la sociedad hay que saber encuadrar el problema, cosa que de por sí es difícil habida cuenta de las múltiples esferas involucradas: la salud pública, la política, el derecho, la filosofía... (y lamentablemente muchos pretenden dejar afuera la ciencia). El lugar de tomar partido es preferible destacar las falencias de algunas posturas. Por ejemplo los partidarios de la libre elección proclaman equivocadamente: "Si estás en contra del aborto, no abortes". Si alguien cree que el aborto es inmoral, dejar que otras personas lo practiquen no es una opción, como no lo es dejar que otros violen o asesinen.

Por otro lado la postura antiabortista a ultranza hace agua en la definición de vida humana que es digna de ser defendida por la sociedad. La falta de esa definición (o sus flaquezas) se pone de manifiesto cuando se aplica a embriones congelados, o células madre, entre otros casos.

Casi todos los aspectos de esta problemática tienen límites difusos y pendientes resbaladizas. Lo que no se puede ocultar es que actualmente existe una técnica no invasiva (pastillas), eficiente y económica para interrumpir un embarazo de hasta 12 semanas de manera segura.

De cualquier modo, el principal mensaje de la discusión sobre el aborto en la educación sexual debe ser la prevención del embarazo no deseado, no planificado, cuya principal incidencia se da en jóvenes menores de 20 y en adolescentes.

(*) http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-85908-2007-06-02.html