En el circuito original no cabe duda que ambas lamparitas, si son iguales, deben brillar por igual. Porque como están agrupadas en serie toda la corriente que atraviese a una debe, obligadamente, atravesar la otra. Si por la de arriba pasan 17.534 cargas, por la de abajo pasarán esas mismas 17.534. En ningún lugar del circuito nacen ni se mueren cargas.
Ahora agreguemos la resistencia en paralelo a la lamparita 2. El circuito general sigue siendo una serie: serie entre la lamparita 1 y el paralelo integrado por la lamparita 2 y la resistencia nueva. El paralelo ese, tiene una resistencia menor que la lamparita 2 sola, y menor también que la resistencia sola. Siempre la resistencia de un paralelo es menor que el menor de sus componentes. ¿Se entiende por qué? Porque una agrupación en paralelo ofrece más caminos para las cargas, de modo que pasar de un lado a otro es más fácil que antes: el medio ofrece menos resistencia.
En particular, si cada una de las tres resistencias (las dos lamparitas y la agregada) todas valen lo mismo: R, entonces el paralelo tiene una resistencia igual a 0,5 R.
Si disminuyó a la mitad uno de los componentes de la serie, la resistencia total de la serie también disminuye; no a la mitad, pero disminuye. Porque la resistencia de una serie es la suma de los componentes de la serie. Antes valía 2 R (las dos lamparitas solas), y ahora vale 1,5 R (la lamparita 1 más el paralelo). Por lo tanto al tener menor resistencia el circuito total sale de la fuente una corriente mayor.
Toda esa corriente que sale ahora, que es mayor a la que salía antes, pasa por la lamparita 1, de modo que ésta tiene que brillar más que antes (ya explicamos la mitad de la respuesta).
Ahora esa corriente, que es un poco mayor (un 33% mayor, hacé la cuenta si querés), se divide en dos partes iguales para atravesar el paralelo. Y son dos partes iguales porque la resistencia agregada es igual a la de la lamparita 2 que, pobrecita, va a ser atravesada por una intensidad de corriente menor a la original... y brillará menos. |