Las enseñanzas del Maestro Ciruela
Monigotología

Es imperdonable que el currículo de los profesorados de Física no contenga una materia que enseñe la ciencia de la monigotología. Yo la aprendí de mis maestros y, a su vez, la enseñé a mis discípulos. Esta nota, por ejemplo, fue ilustrada por mi pollo, Ricardo Cabrera, que aunque sea por temor, suele respetar mis enseñanzas.

Señor Profesor de profesorados: ¿no ha escuchado nunca ese dicho que reza "una imagen vale más que mil palabras"? Y si es así, cómo no hace algo porque se practique en las clases de Física donde es a veces tan arduo llegar con conceptos tan abstractos.

Que los estudiantes se niegan a aprender no es excusa: se los obliga con diferentes métodos coercitivos. Que dibujan mal tampoco lo exime del intento: son palitos y actitudes. Son síntesis.

Mire, mi amigo, el cuento de la vaca esférica me tiene patilludo, usted se olvida de que los estudiantes de sus estudiantes no van a estudiar Física y necesitan profesores capaces de tomar contacto con la realidad concreta de sus vivencias, sus cuerpos, sus movimientos. De a poco irán abstrayendo para imaginar vacas sin patas o caballos puntuales. Hasta que eso ocurra los monigotes son los mejores amigos de la clase, son la gente del pizarrón, son los tipitos que hacen las fuerzas o alcanzan el autobús, los habitantes de las ecuaciones, los mediadores de la imaginación.

Llévese de acá los que quiera, Cabrera se los regala.


Algunos derechos reservados. Se permite su reproducción citando la fuente. Última actualización nov-09. Buenos Aires, Argentina.