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Las enseñanzas del Maestro Ciruela
La guerra del fuego
Los docentes de biología -y de casi todas las asignaturas- buscan películas para compartir con sus estudiantes, y hacen bien. Husmeando en la red se encuentran varias recomendaciones pero lamentablemente es infrecuente que nos indiquen esta película que yo recomiendo fervientemente: La guerra del fuego (La Guerre du feu, producción franco-canadiense-estadounidense de 1981 dirigida por Jean-Jacques Annaud).
La película (que contó con la colaboración del mismísimo Desmond Morris) narra la aventura de un grupo de humanos primitivos que hace 80.000 años lucha por vivir junto al fuego. Tiene numerosos "errores" científicos (entrecomillo errores porque los autores de la película los cometieron a sabiendas entre otras cosas para ampliar el abanico de conductas y situaciones que finalmente describe). Gracias a ello, por cierto, se construye una trama formidable. Además de disfrutar del relato épico tenso, dinámico, vibrante, no excento de humor, deja mucha tela para cortar en el aula. Permítame una lista -incompleta, por supuesto- de aspectos para discutir.
Aciertos:
- el fuego como defensa de los depredadores
- el fuego como calefactor indispensable
- el endurecimiento y afilado de las puntas de lanza
- la posesión del fuego en el hornillo como adquisición tecnológica
- la violación tolerada como método de apareamiento pre-familia-nuclear
- la invención de la postura cara-a-cara de la cópula como pilar de la incipiente institución matrimonial monogámica
- la chispa de la asociación interespecífica de beneficio mutuo o domesticación (simbolizado en el encuentro con los mamuts)
- la institución macho-alfa/líder en la tribu humana
- lanzador de flechas (atlatl) precursor del arco (correctamente ausente)
- el fogón como lugar social fermentador del lenguaje
- la coexistencia entre canibalismo y aversión al canibalismo
- los felinos dientes de sable
Licencias científicas (los mencionados errores):
- coexistencia de sociedades no contempáneas entre sí
- la utilización del forastero como reproductor eugenético
- la aparición del bifaz cuando todavía no utilizan herramientas líticas precursoras
- la presencia de la alfarería en un período netamente lítico
- la ausencia de niños
¡Y cuántas cosas más que se me estarán escapando!
Partiendo de la base que toleremos el anacronismo de mostrarnos coexistencia entre culturas separadas por al menos 50.000 años (el error fundamental) los autores nos invitan a presenciar hitos importantes de nuestra especie. Llena de inteligentes alegorías, voy a mencionar una que leí de Gabriel Andrade*: sobre el final de la película nuestra tribu vuelve a perder el fuego, pero los protagonistas subsanan la catástrofe produciéndolo nuevamente con el método aprendido de una tribu más "moderna", la frotación de palitos. Esto "es una metáfora muy poderosa: la riqueza no se consigue expropiando y quitando a los otros sus recursos, sino más bien, aprendiendo de los demás cómo se generó esa riqueza, y así reproducirla."
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