Las enseñanzas del Maestro Ciruela
Dos modelos de país
Y su relación con la ciencia

La ecuación es tan, pero tan sencilla, que me da bronca que haya gente que no la entienda. Hay básicamente dos modelos de país: uno agroexportador, en realidad exportador de materias primas, en bruto, no elaboradas, granos, petróleo, litio, etcétera. Y el segundo modelo, el industrialista: exportar pero con valor agregado.

El primer modelo es el del dinero fácil, para unos pocos, claro, los dueños de la tierra. Y para los que manejan ese dinero... "y lo hacen trabajar", o sea, la patria financiera. En este modelo la industria sobra, no aporta nada. Y, por supuesto, también sobra la ciencia y la universidad. La fuga de cerebros es una constante.

Los gobernantes representantes más destacados de este modelo fueron (y son) Martínez de Hoz, Videla, Menem, Macri y Milei. Y sabemos perfectamente cómo termina la aventura expoliadora de las riquezas naturales: con un país bananero.

El segundo modelo, el industrialista es el de riesgo, de grandes inversiones, de largo plazo, de fortaleza, de tensión con los países centrales que no quieren competencia y sólo quieren sacarnos las riquezas brutas. Es un modelo de reparto de riquezas, de trabajo para todos. Para este modelo la ciencia no es un adorno, es una necesidad de largo plazo, un insumo imprescindible. La universidad el semillero del futuro, los cerebros se quedan en el país porque visualizan un porvenir. Muchos de los que antes se fueron vuelven.

Los gobernantes representantes de este modelo fueron Perón, Alfonsín, Néstor Kirchner y Cristina Kirchner. Para todos ellos gobernar fue un infierno, los poderosos de siempre los hostigaron y persiguieron, y casi siempre con éxito.

Hay sólo dos modelos, repito. Todo lo demás es maquillaje, chiquitaje.