Estabilidad laboral

Aun cuando el sistema rotativo de la periodicidad de cátedra, basado fundamentalmente en el sistema de concursos abiertos, no fuese primordial para una universidad que persiga la excelencia (aunque indudablemente lo es), la estabilidad laboral sigue siendo un desvalor social, contrariamente a como lo vive, lo pinta y lo propala la mayoría de nuestros dirigentes sociales.

En épocas de desempleo, cuando existen altos niveles de desocupación -como los que vivió la Argentina hace dos décadas-, los puestos de trabajo son un recurso limitado. Entre ellos, los puestos de trabajo en el Estado, como por ejemplo los cargos docentes en las universidades, son recursos que solventa todo el pueblo argentino. Pero no sólo son solventados por todos los ciudadanos: también tienen derecho a ocuparlos. Deben estar periódicamente disponibles para que cualquier ciudadano pueda aspirar a uno de ellos. Son un bien social. ¿Por qué alguien que ocupa el cargo desde antes va a tener más derecho que alguien que hasta ahora no pudo ocuparlo? ¿No pagaron ambos la misma cantidad de impuestos? El Estado no solamente debe obligarse a repartir democráticamente y en forma transparente todos sus bienes, y en especial sus puestos de trabajo, sino que debe elegir para ello criterios rectores que premien los valores que se quieren proteger. Para la universidad, ellos son: la creatividad, el esfuerzo, el trabajo, los conocimientos, la habilidad, la responsabilidad... Nunca la antigüedad.


Algunos derechos reservados. Se permite su reproducción citando la fuente. Última actualización sep-13. Buenos Aires, Argentina.