Tonterías
Multas e inequidades

Casi todos los Estados consagran el derecho conocido como a igual delito igual pena, que garantiza una justicia a todos por igual. Pero cuando la pena es llevada al terreno de las multas la inequidad es palmaria.

Para un millonario, pagar una multa por mal estacionamiento no es más que una propina al cuidacoche. El mismo monto para un laburador de bajo salario es un agujero económico difícil de tapar a fin de mes.

Pareciera que para los propietarios de autos deportivos, tener que pagar una multa por exceso de velocidad es un riesgo insignificante y no dudan en pisar el acelerador a fondo para que el velocímetro marque aquello que el fabricante les prometió cuando desembolsaron la fortuna que costó el auto.

¿Tan hipócrita debe ser el sistema de control de tránsito que no advierte que le está dando luz verde a los poderosos para cometer infracciones, cuando no delitos? Las multas a valor fijo no son más que una licencia otorgada a los poderosos para delinquir.

¿Tan difícil es lograr la equidad no en montos absolutos sino en porcentajes sobre el valor del vehículo, o sobre la declaración de impuestos, o sobre lo que sea... pero en la fracción que le duela a todos por igual?