CONSEJOS ALGEBRAICOS

Cuando enfrentes un sistema de n ecuaciones con n incógnitas, podés estar casi seguro de que tiene solución, es decir, que operando algebraicamente podés encontrar los valores de las incógnitas.

No hay un único método. Básicamente hay cuatro estrategias diferentes que, incluso, se pueden combinar: sumas y restas, igualación, sustitución, determinantes. El último es para expertos. El más democrático es el de sustitución, te lo recomiendo: todos empezamos por ahí.

Sustitución: consiste en tomar una de las ecuaciones (en principio cualquiera) y despejar de ella una de las incógnitas (también podría ser cualquiera). La expresión que obtenés de esa incógnita la reemplazás en otra ecuación donde esa misma incógnita aparezca y despejás otra incógnita nueva. Trabajando así, sucesivamente se llega a la solución de todas las incógnitas. Los caminos diferentes son casi infinitos.

Para elegir con qué ecuación empezar, elegí siempre aquella que tenga menor número de incógnitas (1 es el número ideal). Pero a igual número de incógnitas, elegí aquella ecuación que sea más sencilla, por ejemplo más corta, o que no tenga cuadrados.