Dédalo, tecnología y ética

La tecnología avanza sin mirar para el costado, sorda a los preceptos de la ética, a las quejas de la humanidad, al juicio de la historia. No para de inventar, ni prepotear la sorpresa. Y, como Dédalo, no tiene tiempo de escarmentar de nada, pues ya está embarcada en un nuevo reto. Acá y allá, diseminadas por todas partes del laberinto tecnológico, hay cuestiones que interesan la ética y que tenemos que sondear; ésa es la propuesta que despliega Héctor Ciapuscio en su entretenido Dédalo, tecnología y ética.

Se trata de un libro colorido, ameno, de fácil lectura, integrado por setenta y nueve notas independientes, para leer de a una en esos diez minutos que nos quedaron sandwich o de un saque en una noche de revelaciones.

Hay anécdotas, datos, personajes reales, empresas, países, gobiernos, costumbres, relaciones insospechadas... gancho y erudición. El cuestionamiento ético -no siempre explícito- se mantiene constante durante todo el texto. Pero Ciapuscio no pontifica: sólo menciona, cuenta; es el lector quien decide.  De la mano del autor se entra y se sale por cuestiones variadas, visitadas casi por azar -aunque sin inocencia- como en el laberinto de Dédalo, pero sin la prudencia de Ariadna.
 

Dédalo, tecnología y ética
Héctor Ciapuscio
Buenos Aires, 2006
EUDEBA, 240 páginas