Las enseñanzas del Maestro Ciruela
EL ANGULO OBSCENO

Durante la edad media se conocían los ángulos agudos, llanos y obtusos. Fue justamente durante el oscurantismo cuando los monjes geómetras de la orden de los nabudinos descubrieron los ángulos obscenos, o ángulos Θ.

El nombre que les pusieron fue erróneamente pronunciado desde tiempos pretéritos. Me pregunto por qué se habrá difundido tanto la dislocución de la letra griega theta: la gran mayoría la pronuncia tita cuando su buena y cristiana pronunciación es teta. ¡Ah... hermosa y nutritiva Θ!, ¿por qué te maltratan matemáticos y físicos? ¿Es que no alcanzan a terminar el teorema de Thales sin ruborizarse por tu presencia? ¿Huyen de tales teoremas?

Octava letra del alfabeto griego, en latín se representa con th ya que se pronuncia como una t más fuerte, y al castellano se traduce como t. Athenas, como theta, en español se escribe Atenas y se pronuncia atenas, y no atinas (o sea: si pronuncias atenas, atinas).

Me pregunto cómo, en cambio, habrá perdurado la función trigonométrica seno, que ostenta la misma simetría que teta. Será que sino no era su sino, sino seno.

Pues lo cierto es que, geómetras o no, un grupo de gente muy tilinga instituyó una deformación en la que ahora desembocan los inocentes desprevenidos que quieren nutrirse de la ciencia.

En realidad no me molesta que la gente diga tita y por qué no también rhodesia. Confieso que mi verdadera motivación es que desde que nací preferí teta... y aún se mantiene la preferencia.


Artículo publicado en la revista EXACTAmente. Algunos derechos reservados. Se permite su reproducción citando la fuente. Última actualización jun-06. Buenos Aires, Argentina.