Las enseñanzas del Maestro Ciruela
¿M
edicinas alternativas?

Medicina hay una sola. Lo que algunos llaman medicinas alternativas de medicina no tienen nada. El único contacto que tienen con la medicina es que las profesan comerciantes que tienen título de médico, pero deberían revocárselos. A nadie se le ocurriría llamar astronomía alternativa a la astrología, o física alternativa a la magia (o sea, un set de trucos). Pero hay quienes insisten con lo de la medicina.

Sin importar de dónde surge ni de qué historia proviene, un medicamento o un tratamiento es aceptable y pasa a formar parte del arsenal de la medicina (la única) si se prueba que ese medicamento o tratamiento es efectivo en un ensayo a doble ciego con un número suficiente de pacientes para que el resultado pueda distinguirse claramente de un resultado positivo por puro azar. Doble ciego significa que ni el paciente ni el terapeuta saben -durante el ensayo- si están recibiendo o administrando el tratamiento que se pone a prueba o uno alternativo (por ejemplo un placebo) que se usa como control.

Si quiere puede llamar a esta estrategia científica, pero yo le recomiendo que lo llame simplemente sentido común.

Tal es la insistencia y tan grave el impacto negativo que tienen sobre la salud pública que muchos médicos y científicos sensibles y responsables que se tomaron el trabajo de realizar pruebas y ensayos para verificar que las alternativas tuvieran o no tuvieran efectos curativos. Pues bien, ninguna de ellas tiene más poder curativo que un placebo (que, cualquiera también lo sabe, lo tiene).

Hay quienes se resisten a las evidencias. Algunos, por ejemplo, dicen que la medicina china tradicional debe funcionar, y el argumento es que de no ser así no podría mantenerse en pie luego de más de mil años. No es un buen argumento, pero al menos espero que tomen nota de los siguientes hechos: durante todos los siglos en los que en China no hubo otra medicina que la tradicional la esperanza de vida se mantuvo en 40 años (46,6 registrado en 1960), y desde que llegó a la China la medicina científica, con sus métodos de diagnóstico, sus cirugías, sus vacunas, sus antibióticos, sus medicamentos, etcétera la esperanza de vida al nacer creció de manera constante hasta alcanzar los 78 años de la actualidad. En el mismo período la mortalidad infantil bajó de 83 a 15 muertes por cada 1000 nacimientos. La pregunta es: ¿qué carajo hacían las terapias milenarias durante todos esos siglos?


El presente artículo surge de la lectura del de Javier Peláez "Pero... ¿qué han hecho las terapias milenarias durante todo ese tiempo?" al que se puede acceder acá. Algunos derechos reservados. Se permite su reproducción citando la fuente. Última actualización ago-16. Buenos Aires, Argentina.